El éxito de Ouya en Kickstarter y la enorme expansión que están teniendo los smartphones con sistema operativo Android está llevando a algunas compañías a trasladar este sistema operativo al mundo de los videojuegos. Se trata, sin duda, de una decisión algo arriesgada, ya que es un mercado muy copado por las grandes consolas y el PC; pero ello no desanima a los desarrolladores, que ven en el software libre un nuevo cauce por donde expandirse.
El último proyecto que apuesta por un dispositivo gamer Android es Green Throttle, diseñado por algunos miembros de Palm y de la franquicia Guitar Hero. Su propósito busca convertir nuestro smartphone o tablet Android en toda una consola de salón.
El proyecto no es tan sofisticado como el de Ouya, que es una consola en sí misma, sino que utiliza el smartphone o tablet que tengamos como base de hardware. En realidad, la idea consiste en conectar nuestro dispositivo a una televisión a través de HDMI o MHL y comenzar a jugar con un mando inalámbrico específico llamado Atlas Controller.
Evidentemente, es necesario que el juego esté optimizado para dicho periférico. Según informa la compañía en su propia web, ya han conseguido atraer a un buen número de desarrolladores, pero se pretende crear toda una base de juegos en torno a este concepto tan sencillo.
Poco más se sabe de este proyecto: el mando costará 45 dólares, y será compatible con Ice Cream Sandwich en adelante. Obviamente, aún no hay fechas, ni estimaciones de la salida de este nuevo producto. Toca esperar.
Más información | Green Throttle
En Dosis Gadget | Ouya hace amigos y ya es una de las consolas más prometedoras